Centro de Investigación en Medicinas Alternativas
En nuestro centro CIMA creemos que, la iridología es una ciencia real y que permite conocer algunos aspectos de la salud de nuestros pacientes
A partir de la pupila se pueden determinar en el iris siete zonas:
1.- Área estomacal
2.- Zona intestinal
3.- Glándulas suprarrenales, área cardiaca, riñones y pituitaria
4.- Conductos bronquiales, glándulas pineal y pituitaria
5.- Cerebro y órganos reproductores
6.- Bazo, tiroides e hígado
7.- Área de la piel, sistema linfático y circulatorio, glándulas sudoríficas, músculos y nervios motores y sensitivos.
En la actualidad, la iridología sigue teniendo vigencia como herramienta de diagnóstico y ha entrado en la era tecnológica moderna con el uso de aparatos electrónicos digitales avanzados que son capaces de capturar la imagen nítida del iris de la persona, transportarla a una pantalla de computadora, y por medio de programas especializados ayudar a la interpretación de los cambios observados.
Mediante terapias naturales
La Iridología es a la vez arte y ciencia que se lleva a cabo con la observación del iris del ojo así como de la esclerótica (lo blanco del ojo) que dejan ver el estado de salud general de un cuerpo.
La base de la iridología parte del conocimiento que el tejido del iris se deriva de la misma capa embriológica que el sistema nervioso. La integración de la información que va a todas las áreas de la corteza cerebral, ganglios basales, hipotálamo y tronco cerebral.
La ciencia de la iridología se basa en el análisis del color y de las delicadas estructuras del iris y no tiene relación alguna ni con la oftalmología (rama de la medicina alopática que estudia las enfermedades de los ojos) ni con la optometría que corrige los errores refractarios utilizando lentes ópticas.
Los ojos como órganos sensoriales tienen vías nerviosas que llevan información al sistema nervioso central para su procesamiento. Esta información se envía a través del sistema nervioso central periférico y estos impulsos nerviosos inervan los músculos, órganos y glándulas del cuerpo.
Los ojos están conectados con el cerebro a través de los nervios ópticos, con el sistema nervioso simpático y con la médula espinal. Están inervados por cuatro de los doce pares de nervios craneales y contienen además, cuatro de los tejidos del cuerpo: epitelio conectivo, muscular y nervioso, además de que reciben líquidos nutritivos como la sangre y la linfa.
El iris es un mundo de diminutos detalles en sí mismo y está capacitado para almacenar información, de modo que en la iridología, el iris, simplemente, se convierte en el vehículo transmisor entre el cuerpo y el iridólogo para que éste último pueda reconocer el estado de los órganos mediante las señales que éstos proyectan en él.
La estrecha asociación de los ojos con el hipotálamo, la hipófisis y la glándula pineal, glándulas endocrinas encargados del control y centros de procesamiento para todo el cuerpo, los hacen estar en contacto directo con los procesos bioquímicos, hormonales, estructurales y metabólicos del organismo.
Toda la información del cuerpo que se recibe a través de las conexiones nerviosas y bioquímicas, se registra en las diferentes estructuras del ojo, como iris, retina, esclerótica, córnea y conjuntiva y por eso puede decirse que los ojos reflejan lo que está sucediendo a nivel del cuerpo físico, pensamientos y emociones de la persona.